Inicio

/

Por Editorial

/

Ouch!

Ouch!

$19.200
Hasta 3 cuotas sin interés de $6.400 con tarjetas seleccionadas
Ver más detalles
Agregar al Carrito
Cargando
No sé mi código postal

Más información

EDAD: +4 / JUGADORES: 2 - 4 / TIEMPO DE JUEGO: 15 Min.

Ouch! Es un juego de cartas creado por Romain Caterdjian y Théo Rivière e ilustrado por Fran Collado. Recomendado a partir de cinco años, pueden participar de 2 a 5 jugadores en partidas de unos diez minutos de duración. Los jugadores competirán por obtener el mayor número y más variedad de flores de cactus, evitando los pinchos afilados.

Aprender las reglas no les llevará más de 10 minutos. Para empezar a jugar, barajen las 44 cartas de cactus y déjenlas en el centro de la mesa. Roben seis cartas del mazo y pónganlas en fila mostrando su reverso. Estos son los cactus que tienen a su disposición mientras exploran el desierto. Cuantas más flores muestre el reverso, mayor será la recompensa, ¡pero también será más peligroso obtenerla!

El jugador más joven es el primero en intentar conseguir las preciadas flores del desierto. Elige cualquiera de las seis cartas que hay en el centro de la mesa, tomándola por uno de sus cuatro lados. Decide si le das la vuelta por el lado izquierdo, derecho, superior o inferior. Si el lado elegido muestra un cactus... ¡Ouch! Te has pinchado y no has podido recoger la flor; deja la carta en la caja. En caso contrario, quédate la carta en tu zona de juego. A continuación, rellena la fila de cartas para que siempre haya seis disponibles.

La partida se desarrolla por turnos en sentido horario, en los que cada jugador repite esta misma secuencia. Entre las cartas de cactus también se ocultan animales del desierto, que aportan efectos especiales a la partida. Si revelas una carta en la que hay un animal y no te has pinchado con las púas del cactus, ¡podrás beneficiarte de sus poderes! Por un lado, están las siseantes víboras: una vez obtenida, si el siguiente jugador se pincha con una espina, deberá entregarte la carta en vez de devolverla a la caja. Por otro lado, el fenec, el zorro del desierto, te permite, si lo deseas, jugar un segundo turno seguido. Sin embargo, si te pinchas en este turno adicional, ¡también perderás la carta del fenec!

Un último detalle que deben tener en cuenta mientras exploran el desierto es que no todas las flores son iguales... Si te pinchas con una carta de cactus que tenga una flor roja, además de descartarla deberás perder una segunda carta de tu reserva a tu elección. Sin embargo, no hay riesgo sin recompensa: al final de la partida, el jugador que tenga más flores rojas gana 5 puntos adicionales.

Cuando un jugador haya obtenido ocho cartas o cuando el mazo central se agote, la partida se acaba. Para determinar el ganador, hay que sumar un punto por cada flor obtenida, la bonificación de cinco puntos para el jugador o los jugadores que tengan más flores rojas y una última bonificación de ramo silvestre: cuatro puntos adicionales por cada conjunto de cuatro flores de colores distintos que tengas. ¡Quien sume más puntos, ha ganado!

Ouch! Está pensado para jugar con los más pequeños de casa. Si es el caso, puedes ajustar la dificultad y prescindir de algunas reglas, como la de los animales del desierto o la penalización de las flores rojas. ¡Salgan de expedición y vuelvan con los ramos más vistosos!